jueves, 24 de diciembre de 2009

Papá; no él


Mi primera pelota me la regaló el mismo que me obsequió mi primera camiseta de fútbol. No casualmente fue el que me hizo hincha de mi club y, también, el que fue DT una vez con el propósito de hacerme debutar en un campeonato de fútbol.
Y lo más importante: el que me enseñó que a la pelota hay que pasarla porque hay una por partido y compañeros, un montón.
En estos días de tanto fetichismo cristiano bien vale reivindicar a los héroes de carne y hueso. Yo elijo a mi papá; el que me hizo regalos auténticos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hace más de 4 años perdí a mi héroe auténtico y uno de los últimos regalos fue una playera de mi equipo, de eso hace ya más de 5 años. Un saludo pambolero

Elías Leonardo

Anónimo dijo...

además el gordo es un invento de la coca cola!!! puaj