miércoles, 27 de octubre de 2010

Oda al gol


El fútbol, tantas veces desmerecido por los intelectuales, tuvo la mejor de las ideas: inventar el gol.
Nadie podrá jamás revelar el secreto del truco más guardado. La magia pura se manifiesta en la explosión que provoca la inocencia de la pelota cuando salta la línea que divide el arco del resto de la cancha.
La hinchada, por entonces, se devora ese momento con la boca y los abrazos abiertos. Mientras, el mundo se detiene un instante. Ninguna cosa sucede alrededor del gol. Nada. La pelota que entra y los hinchas que celebran son la comunión de un instante sublime, repleto de emociones. Los hombres y las mujeres se hacen más humanos durante ese ratito. Por esa razón, el gol es una gran idea; quizás la mejor invención de todas. Aun en la contradicción de que cuando el gol se produce, no sea posible pensar.

2 comentarios:

Andrecho dijo...

Genial relato, Marcelo. El gol es el orgasmo del fútbol. Razón fundamental para desatar alegrias y tristezas. Abrazo grande....

Anónimo dijo...

¡Qué lindo es poder leerte!
Beso

MM